MAS DEL 90% DE LAS VECES, LOS INCENDIOS SON PROVOCADOS POR EL SER HUMANO

En diálogo con la prensa, el Jefe de Bomberos de Artigas, Richard Miraglia, expresó su preocupación por la creciente cantidad de incendios en el departamento al concluir el primer mes de verano. Aunque la temporada aún no ha llegado a su fin, la situación es alarmante, con más de 15 incendios registrados en campos, de los cuales al menos 10 superan las 100 hectáreas.

«Por suerte, no hemos tenido que intervenir en casos donde se hayan lamentado pérdidas humanas, ni en incendios que involucren viviendas o accidentes vehiculares graves», destacó Miraglia.

El panorama se complicó con lo que ya es considerado el incendio más grande del país hasta el momento, que afecta a 2.000 hectáreas de campo. «Este incendio ha sido el más grande registrado hasta ahora en Uruguay, y nos ha exigido un esfuerzo considerable», comentó.

Pese a las dificultades, Miraglia subrayó que los bomberos estaban preparados para enfrentar este tipo de emergencias. «Sabíamos que sería una temporada compleja, y hemos tenido que recurrir a recursos adicionales, como el CECOED, para poder controlar los incendios», explicó. Aunque la colaboración interinstitucional fue clave, las tareas de extinción de fuego continúan siendo una prioridad.

Consultado por el personal, el Jefe de Bomberos sostuvo: «A nivel nacional estamos bastante bien preparados para enfrentar los incendios en esta temporada». Sin embargo, reconoce que la magnitud de algunos incendios obliga a ajustar los recursos disponibles. «A veces los incendios son tan grandes que necesitamos más recursos, lo que nos lleva a pedir apoyo a otras instituciones como el Ejército y la Intendencia.

En zonas rurales como Bernabé Rivera y Topador, la población local también ha jugado un papel fundamental en la contención de los incendios.

Las condiciones climáticas de este verano han hecho la situación aún más peligrosa. Las lluvias del 2024 favorecieron el crecimiento de las pasturas, que ahora se encuentran secas y muy susceptibles al fuego.

La situación ha obligado a intensificar las sanciones para aquellos que infringen las medidas normativas sobre quemas. “No solo nos enfrentamos a un problema ecológico, sino también a un problema de salud pública. Los incendios afectan a la población, a los bienes y, lo más grave, la vida.

El Código Rural establece que las quemas solo están permitidas bajo ciertas condiciones, y siempre deben ser notificadas a las autoridades correspondientes. En caso de no cumplir con estos requisitos, las sanciones pueden ser severas, incluyendo multas o incluso cargos por delito de incendio.

“Si cada persona se hiciera responsable de su entorno, podríamos reducir en gran medida estos incendios. Pero necesitamos la colaboración de todos: la información es clave».

Los números de contacto son el 4772-5231 o 2030-3607, o el número de emergencia que es el 911.

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