El Ejército Nacional realizó este martes un homenaje al soldado Rodolfo Álvarez a un mes de su fallecimiento, ocurrido el pasado 25 de enero mientras prestaba servicios en la misión de paz de Naciones Unidas en el Congo.
Durante la ceremonia compañeros de la unidad de origen de Álvarez hicieron uso de la palabra y destacaron que el soldado «fue un ejemplo de compromiso, valentía y amor por la paz. Con su uniforme, llevó el nombre de Uruguay a tierras lejas con la firme convicción de proteger a los más vulnerables y contribuir a un mundo más justo».
Los presentes realizaron un minuto de silencio y depositaron una ofrenda floral en su homenaje y a los demás Cascos Azules uruguayos caídos en misiones de paz.
Álvarez murió durante un ataque del grupo rebelde M23 sobre el vehículo que conducía. Tras varias semanas de espera, su cuerpo fue repatriado el pasado 13 de enero. Sus restos fueron sepultados en Santa Clara de Olimar, en el departamento de Treinta y Tres, de donde era oriundo. Había ingresado a la fuerza a los 20 años y era padre de tres hijos, la menor de cuatro meses.
