En medio de un escenario político convulsionado tras los últimos comicios internos, Rodolfo Riani, referente de Cabildo Abierto en el departamento de Artigas, analizó los resultados electorales, los desafíos del partido, y las tensiones internas que marcaron la campaña.
En diálogo con la prensa, Riani fue claro al señalar que, si bien el partido no obtuvo los resultados esperados a nivel local, la estructura sigue firme y el proyecto continúa. “Lo que vimos fue que Cabildo Abierto de Artigas fue el que más votos obtuvo a nivel nacional en proporción. Sin embargo, nuestra fracción local se vio muy disminuida”, reconoció.
Según Riani, uno de los sectores que se impuso en la interna departamental fue la lista 44, encabezada por Wilfredo Correa, quien recientemente anunció su alejamiento del partido. “Es importante recordar que en 2019 Cabildo Abierto obtuvo 9.500 votos en Artigas, cuando la figura del señor Wilfredo Correa ni siquiera existía políticamente. Los votos que hoy acompañan a Correa son circunstanciales y entendemos que muchos de esos volverán a Cabildo”, aseguró.
Riani no ocultó su malestar por lo que consideró un trato injusto hacia el líder nacional del partido, Guido Manini Ríos. “Cabildo Abierto ha sido ninguneado tanto desde adentro como desde la coalición. El Partido Colorado y el Partido Nacional golpearon fuerte, y eso afectó nuestra imagen”, afirmó. Y agregó: “Además, dentro del partido, hubo sectores que públicamente menospreciaron la figura de Manini”.
El congresista artiguense valoró positivamente el reciente Congreso Nacional del partido, donde se reafirmó la línea ideológica artiguista. “Gracias a Dios, se abrió el camino. Tuvimos un Congreso al que muchos no se animaron a asistir. Mandaron una carta de renuncia antes de dar la cara. En el anterior, terminaron entre insultos y botellas volando. Eso no es política”, denunció.
Con la salida de tres ediles que integraban el sector de Correa, Cabildo Abierto pierde representación en la Junta Departamental. No obstante, Riani minimizó el impacto: “Esto es lo que la gente votó. Somos republicanos y demócratas. Hay que aceptar el resultado y seguir trabajando”.
Consultado sobre cómo revertir el escenario adverso, Riani fue enfático: “Volver a las raíces. Reivindicar los principios artiguistas de Manini, que siguen vigentes desde 2019. Él no va a cambiar. Lo que cambió fue el entorno: durante años trabajó bajo presión, con una estructura que no pudo consolidar por la pandemia y por tener que recorrer el país junto a Irene Moreira”.
Uno de los temas más candentes fue el cruce con Wilfredo Correa, que incluso podría derivar en acciones judiciales. Riani se mostró sorprendido por la posibilidad de una denuncia: “Me dijeron que en una conferencia de prensa mencionaron mi nombre, pero no escuché nada concreto. Y jamás cuestioné la carrera militar de Wilfredo. Lo que hice fue referirme a lo que en política llamamos ‘la hoja de vida’”.
Para Riani, todo político debe rendir cuentas sobre su trayectoria pública: “Yo también tengo una hoja de vida. Si hice algo mal en Casa Abierta, la gente tiene derecho a saberlo. Pero también si hice las cosas bien. Lo mismo aplica para Correa. Decir cómo llegó, quién lo trajo, cómo se fue, no es una agresión: es transparencia”.
Riani fue categórico al rechazar que haya culpado al periodismo por la situación del partido, pero sí cuestionó el doble rasero con que —según él— se tratan ciertos temas. “Hay spots de campaña donde se acusa de corrupción directamente. Si fuera al revés, ya habría denuncias. ¿Por qué no se investiga la hoja de vida de todos los candidatos, incluido el señor Radaeli, actual referente de los Espacios de los Pueblos Libres?”, cuestionó.
Finalmente, Riani defendió su apertura con la prensa: “Nunca les negué un reportaje. Nunca condicioné las preguntas. Pero sé que hay políticos que sí lo hacen. Yo no tengo nada que ocultar y por eso estoy acá, dando la cara”.
“Esto no es personal, es política. Y la política no es para cualquiera”, cerró Riani, dejando claro que su pelea es ideológica y no individual.