La fiscal Sabrina Flores investiga la utilización de varias unidades de la Policía por parte del exjefe de custodia presidencial, Alejandro Astesiano, para investigar la posible vinculación de Marcelo Abdala, presidente del PIT-CNT, con una boca de venta de drogas.
Astesiano revisó cámaras de seguridad del Ministerio del Interior, reenvió capturas y videos, pidió información y reuniones en distintos niveles.
El custodio presidencial, ahora en prisión, pidió a los efectivos de la Brigada Antidrogas que posaran su atención sobre un autoservice ubicado en la Ciudad Vieja que según las propias palabras de Astesiano «tenía pinta de boca» y que había sido frecuentado por Abdala previo a su siniestro de tránsito.
Los efectivos acataron la misión entregada por Astesiano entre el 16 de febrero y el 15 de marzo, pero el resultado fue negativo. Las vigilancias de video y presenciales en el lugar no arrojaban elementos que probaran la existencia de una boca de venta de drogas en ese lugar, un veredicto que, según Astesiano, ya le había adelantado el propio jefe de la Policía. El libro deja constancia que al menos en una ocasión se comunicó directamente con el presidente Lacalle Pou por este tema.
Luego de la publicación en Búsqueda y La Diaria, dirigentes del Frente Amplio rechazaron que se haya utilizado a la Policía para una investigación contra el sindicalista.
Uno de los que opinó fue el precandidato a la Presidencia, Yamandú Orsi: «Lo que se publica en dos medios hoy demuestra que, además de espionaje a senadores de la oposición, le quisieron inventar un caso al presidente del PIT-CNT. Fue Astesiano, desde la Residencia de Suárez y el presidente de la República estaba al tanto. ¿Habrá límites».
Orsi recibió la respuesta del exministro de Defensa Nacional, el senador nacionalista Javier García: «Faltan 20 días para elecciones y no se les cae una idea. Marset, Astesiano, Penadés, de ahí no salen. Operan fiscalía, operan la prensa, libros, pero ideas nada. La semana pasada Orsi: el país se cae a pedazos, ayer Orsi: la economía está bien. Dan pena».
